Cómo desarrollar un diseño de email efectivo

Existen buenas y malas prácticas en el diseño de emails, y patrones que se repiten constantemente. Repasamos algunos de ellos.

El email marketing es, en términos generales, una estrategia de difusión y promoción que se apoya en los correos electrónicos para lanzar campañas publicitarias o realizar contactos comerciales. Sus objetivos pueden ser muchos: Dar a conocer un producto, anunciar una oferta de algún artículo o invitar a nuestros clientes a un evento. 

Pero, ¿cómo conseguimos todo eso? Existen muchas variables y aspectos a tener en cuenta para crear una estrategia de email marketing para ecommerces efectiva, pero hoy vamos a hablar de una de las más importantes por ser la parte visible de nuestro plan: el diseño del email.

A continuación, compartimos con vosotros varias consideraciones a tener en cuenta a la hora de desarrollar un diseño de email efectivo.

Principales consideraciones de diseño de emails

No existe una manera única y perfecta de realizar un diseño de email, pero sí que podemos tener presentes una serie de consideraciones muy útiles para empezar:

• Cuál es el objetivo que queremos conseguir en nuestro diseño de email
• Cómo perciben nuestra empresa nuestros clientes
• Los dispositivos que utilizarán para abrir el email.  Este último aspecto podremos conocerlo a través de la analítica posterior al emailing.

Una vez tenemos estos tres aspectos en cuenta, debemos pensar en aspectos más técnicos para el diseño de nuestro email o newsletter:

• Ancho y largo: en función de cuánta información deseas presentar en tu newsletter, el diseño del email tendrá, sobre todo, un largo diferente. El ancho estándar es de unos 600px. Evita sobrepasar esta medida para que el email no aparezca desmontado en la bandeja de entrada de tus clientes.
• Disposición de elementos: la disposición del contenido debe tener una fácil visualización y estructurada con lógica. Además, debes pensar en cápsulas o módulos de información que se puedan dividir en cuadrados, rectángulos y columnas. 

  

• Elementos generales: en cualquier diseño de email siempre deben haber los siguientes elementos:
  • Asunto: tu puerta de entrada. Aunque no está relacionado 100% con el diseño de email, el asunto es esencial para que nuestros clientes abran el correo y vean el diseño que hemos preparado. Para conocer las bases de un asunto perfecto, en este post hablamos de consejos para la elección de asuntos.
  • Cabecera: debe tener una consistencia de comunicación, siempre deberá aparecer el nombre y logotipo de nuestra tienda dropshipping. Puede ir acompañada de un título o imagen concreta para dicho email pero, en líneas generales, debe siempre tener el mismo estilo general.
  • Cierre/Footer: siempre debe incluir la información corporativa que queramos destacar: dirección, email general, teléfono, redes sociales, enlace a la tienda online y/o el blog (si disponemos de él) pero, sobre todo, el elemento más importante del footer es la opción para que nuestros usuarios se den de baja de nuestra base de datos. Aunque no nos guste, la ley nos obliga a darles la opción de irse si ya no están interesados en recibir más emails.
  • Opción “Ver en el navegador”: es un sencillo enlace que suele colocarse en la parte superior, y que abrirá ese mismo email en un navegador. Sirve para solucionar rápidamente cualquier problema de visualización o no carga de imágenes.

Cómo realizar un diseño de email efectivo

Una vez conocemos los elementos básicos para el diseño de email, el éxito de nuestra campaña irá ligado a cómo disponemos y maquetamos esos elementos en el correo para hacerlo atractivo y útil para el usuario.

Existen tantas buenas prácticas como campañas de email marketing exitosas, pero hay algunos patrones que se repiten constantemente. Repasamos algunos de ellos:

• Utiliza tablas para maquetar el contenido: algunos programas de gestión de email marketing, como Mailchimp, ya tienen incorporada esta función. Sin embargo, si quieres comenzar a maquetar los diseños de email por ti mismo, debes saber que la regla número uno es utilizar tablas para que no se nos descuadre ningún elemento del email.
• Elige diseños simples: un email simple es un email, en líneas generales, exitoso. Por muchas razones: permiten adaptarse a los dispositivos móviles más fácilmente que los diseños complicados, ningún servidor de correo tendrá problemas para visualizarlos, evitarán colarse en las listas de spam (una característica común de este tipo de emails es utilizar colores y elementos muy llamativos) y permitirán a nuestros usuarios entender perfectamente lo que queremos.
• Piensa muy bien el Call to Action (llamada a la acción): a los usuarios, sobre todo los que buscan adquirir productos por Internet, les persuaden fácilmente los mensajes directos. El diseño de tu email no funcionará igual si lo planteas como un catálogo de productos sin más que si incluye mensajes como “Aprovecha esta oferta, sólo disponible 24 horas” o “Llévatelo antes de que se terminen”. El Call to Action es ese mensaje directo en el que le dices al usuario lo que quieres de él.
• Utiliza imágenes persuasivas: parece obvio pero, en una tienda online, las imágenes de producto representan un alto porcentaje en las futuras ventas. Piensa que nuestro cliente se va a basar en una foto a la hora de decidirse por nuestro producto, por lo que, en el diseño de nuestro email, deben verse muy bien. Eso sí, no te pases de calidad si no quieres que tu email pese demasiado. Lo ideal es que reduzcas el peso de la imagen (que no el tamaño) todo lo que sea posible. Cuando veas que empieza a pixelarse, para.

Alguna mala práctica para aprender de los errores

Por supuesto, las malas prácticas también abundan en las estrategias de diseño de emails. Repasamos algunas de las más repetidas:

• Imágenes no recomendadas: aunque ahora están totalmente de moda, los GIFs no son todavía recomendables al 100% puesto que este tipo de imágenes no funcionan en todos los gestores de correo. Alguien que habrá tu correo desde su Gmail en el explorador podrá verlos sin problemas, pero los que lo lean desde un Office de Escritorio verán una imagen fija.
• Abuso de imágenes: aunque son muy bonitas y llamativas, si sobrecargamos nuestro diseño de email con demasiadas imágenes, pueden tardar mucho en cargarse una vez nuestro cliente recibe el email, por lo que puede desistir de esperar. Además, muchos proveedores de servicios de email pueden, directamente, bloquear las imágenes, dejando el email en blanco cuando lo recibe nuestro cliente (si éste presiona el botón que aparece automáticamente para desbloquear las imágenes podrá verlo sin problema, pero mejor dejar lo mínimo al azar).
• Otros errores: en el artículo sobre errores comunes al realizar email marketing compartimos muchos más ejemplos de malas prácticas, no tan relacionadas con el diseño de email, pero muy interesantes si queremos desarrollar una estrategia efectiva.